Este proyecto combina el estilo industrial con los colores corporativos para dar vida a una oficina de 500 m² diseñada para inspirar productividad y colaboración. Cada elemento fue cuidadosamente pensado para reflejar la identidad de la empresa, mientras que el diseño espacial maximiza tanto la funcionalidad como la estética.
El diseño open plan fomenta la interacción entre equipos, creando un flujo de trabajo dinámico y moderno. Al mismo tiempo, las oficinas privadas y salas de conferencias están diseñadas para garantizar espacios tranquilos, ideales para reuniones y concentración.
Las áreas comunes, como la kitchenette y los espacios de reuniones informales (meeting points), se han convertido en verdaderos núcleos de interacción. Estos sectores están diseñados no solo para ser funcionales, sino también para promover un ambiente de comunidad y trabajo en equipo.
Cada detalle del diseño, desde los gráficos y los materiales hasta la iluminación, tiene una intención específica: reflejar los valores corporativos y dotar de carácter a cada sector de trabajo. El uso de materiales industriales, como hormigón expuesto, acero y madera, combinado con los colores distintivos de la marca, logra un entorno profesional, flexible y con personalidad única.