En este proyecto de remodelación de oficinas, nos enfocamos en realizar intervenciones puntuales que transformaran la dinámica laboral de manera significativa. En lugar de grandes modificaciones, pequeños cambios en mobiliario, iluminación LED y detalles decorativos fueron suficientes para generar un cambio radical en la forma de trabajar.
Aplicamos conceptos de neuroarquitectura, donde se prioriza cómo los espacios y las texturas afectan nuestro bienestar y productividad. La idea fue crear un ambiente que promoviera la comodidad y una mejor experiencia al habitar el espacio, favoreciendo una atmósfera que no solo sea funcional, sino también emocionalmente estimulante.
Para intervenir las áreas más transitadas y los espacios colaborativos, se seleccionaron materiales y colores cuidadosamente. La madera ceniza fue elegida por su capacidad de integrarse armónicamente con la materialidad existente, aportando calidez sin desentonar con el entorno. Esta tonalidad sutil pero moderna añadió una nueva capa de sofisticación, sin perder la continuidad con el diseño previo.
El resultado es un espacio donde la estética y funcionalidad se complementan, logrando que las oficinas no solo sean más eficientes, sino también más agradables y estimulantes para quienes las habitan.